sábado, 8 de enero de 2011

Nuestra sociedad
 
En toda sociedad existen diferencias entre las personas, caracteristicas biológicas o culturales que nos hacen  distintas unas de otras.
Somos diferentes en edad, sexo, etnia, religión, lugar de nacimiento y conocimientos.
En el Ecuador, hay mujeres y hombres; indigenas, mestizos y mestizas, negras y negros: gente de la costa, de la sierra, del oriente y la región insular, con sus diversas culturas, modos de hablar, de vestir, de relacionarse: de diferentes creencias religiosas: originarias o ancestrales, cristianos/as, judios/as, pentecostales, ateos/as. Así como existe una hermosa variedad de climas, suelos y regiones, también tenemos una rica variedad de personas.      
 
Pero sucede que en nuestro pais -y en la mayor parte de las naciones del mundo- muchas personas y grupos tienen menos oportunidades para acceder a los recursos y beneficios sociales; sus derechos no están garantizados debido a su sexo, etnia, religión, orientación sexual, clase social....Entre estos colectivos se encuentran las mujeres, los pueblos indigenas y afrodescendientes, personas con capacidades especiales o diferenciadas, las poblaciones rurales, hombres y mujeres en situación de pobreza, niños y niñas, las personas de la tercera edad, etc.
Vemos entonces que se han producido "dieferencias" que no son naturales sino "sociales".
    
Las consecuencias de la exclusión social hacia estos grupos conducen a una democracia formal, no representativa, cuyos efectos se miden por su discriminación, abuso, subordinación, violencia e invisibilización.  
Es importante dar pasos para construir la unidad en la diversidad, respetando y valorando a cada sector de la población; también podemos empezar a trabajar con todos los grupos y personas por la defensa de la vida; el desarrollo social y el ejercicio de nuestros derechos. Es el momento de sentar los cimientos de una sociedad en la que todas las personas sean escuchadas, atendidas y sus derechos sean reconocidos y garantizados.  
                 
Las diferencias biológicas y culturales son normales y pósitivas, Sin embargo, aunque las personas en Ecuador somos diferentes, todas y todos tenemos los mismos derechos y, somos todas/os iguales.                                  

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